Complicaciones más comunes de las varices | Dr Rafael Sánchez
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Complicaciones de las varices: por qué debes estar atento

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Complicaciones de las varices: por qué debes estar atento

Las varices no son solo un problema estético. Aunque muchas veces se ven como «venitas molestas», la realidad es que pueden tener consecuencias mucho más serias si no se tratan a tiempo.

Desde molestias leves como hinchazón y picor, hasta problemas graves como úlceras o trombosis, es importante conocer las posibles complicaciones para actuar rápido.

En este artículo te explicamos de forma sencilla y clara cuáles son las complicaciones más comunes de las varices, cómo afectan a tu cuerpo y qué puedes hacer para prevenirlas o tratarlas. Porque cuidar tu salud empieza por entender lo que ocurre en tu cuerpo.

¡Sigue leyendo!

 

Complicaciones más frecuentes por no tratar las varices

Las varices pueden traer consigo una serie de problemas que afectan tanto a la apariencia como a la salud de tus piernas. Estas complicaciones no solo pueden causar molestias, sino que en algunos casos pueden volverse serias si no se tratan a tiempo.

A continuación, te explicamos de manera detallada cuáles son y lo que necesitas saber sobre cada una.

 

1. Síntomas iniciales que podrían empeorar

Cuando tienes varices, las primeras señales suelen parecer algo «normal» o pasajero. Tal vez notas que al final del día tus piernas están más hinchadas de lo habitual. Esto es lo que se llama edema, y aunque al principio puede que solo moleste un poco, si no le prestas atención, puede empeorar.

La hinchazón constante puede hacer que te sientas más incómodo al caminar o estar de pie.

Además, muchas personas con varices hablan de una sensación de pesadez en las piernas. Es como si llevaras un peso extra todo el tiempo. ¿Te suena familiar? Esta pesadez puede ir acompañada de un dolor sordo o incluso punzante.

Y aquí está la cosa: ignorarlo no ayuda. Si no cuidas tus piernas, este malestar puede hacerse más fuerte con el tiempo, afectando tu rutina diaria.

 

2. Cambios visibles en la piel

Si tienes varices, quizá ya hayas notado que la piel alrededor de las venas empieza a cambiar. Al principio, puede ser solo un ligero oscurecimiento, como si la zona estuviera más «sombrajeada».

Esto ocurre porque la circulación no es tan buena como debería, y con el tiempo, la piel puede volverse más fina o incluso más frágil.

Pero aquí no termina la cosa. A medida que el problema avanza, la piel puede engrosarse y volverse más dura. Este cambio no solo afecta la apariencia, también puede ser incómodo. Es como si la piel estuviera más tirante y menos flexible.

Otro detalle común es la sequedad. ¿Alguna vez te ha pasado que la piel se ve opaca o que pica más de lo normal? Pues es un efecto directo de las varices. El problema es que al rascarse, podrías dañar la piel, aumentando el riesgo de infecciones o heridas que tardan en curarse.

Estos cambios pueden parecer solo estéticos, pero no lo son. Indican que las varices están afectando más allá de las venas, y es una señal para actuar antes de que surjan complicaciones mayores.

 

3. Complicaciones graves

Cuando hablamos de varices, no solo se trata de que se vean feas o incomoden un poco.

Si no se tratan a tiempo, pueden aparecer complicaciones más serias. Vamos a verlas una por una para que entiendas por qué es importante no dejarlas de lado.

 

a) Úlceras venosas

Las úlceras venosas son como heridas abiertas que aparecen en la piel, sobre todo cerca de los tobillos.

Estas heridas no son normales y, para ser honestos, son bastante molestas. Pueden tardar semanas o incluso meses en cicatrizar. ¿Por qué? Porque la mala circulación en las varices dificulta que la piel reciba los nutrientes y el oxígeno que necesita para cerrar las heridas.

Así que no es solo una cuestión de tiempo, sino de buscar tratamiento adecuado.

 

b) Flebitis

Otro problema común es la flebitis, que no es más que la inflamación de una vena. Esta inflamación puede hacer que la zona afectada esté roja, caliente y bastante dolorosa.

A veces incluso puedes sentir un bulto donde está la vena inflamada. No es algo que deba ignorarse porque, además de ser incómodo, puede ser un aviso de que algo más serio está pasando en tu sistema circulatorio.

 

c) Coágulos de sangre (trombosis)

Aquí viene lo más serio: las varices pueden aumentar el riesgo de desarrollar coágulos de sangre.

Si estos coágulos se forman en las venas superficiales, puede que solo causen dolor e inflamación. Pero si se forman en venas más profundas (lo que se llama trombosis venosa profunda), la cosa cambia. Estos coágulos pueden viajar a los pulmones y causar una embolia, que es una emergencia médica.

Por eso, si notas dolor intenso, hinchazón repentina o cambios de color en la piel, es mejor ir al médico de inmediato.

 

d) Sangrado

Por último, pero no menos importante, está el sangrado.

Las varices están justo debajo de la piel, lo que las hace más vulnerables. Incluso un pequeño golpe o rasguño puede causar un sangrado que no para tan fácilmente. Si te pasa, lo mejor es presionar la zona y buscar atención médica si el sangrado es intenso.

 

4. Otros problemas secundarios

Además de las complicaciones más graves, las varices pueden causar otros problemas que, aunque menos peligrosos, no dejan de ser molestos. Uno de los más comunes es el picor. Esa sensación de picazón constante alrededor de las venas puede volverse muy incómoda, sobre todo al final del día.

El picor suele estar relacionado con la sequedad de la piel que mencionamos antes. Sin embargo, rascarse no es buena idea.

Aunque al principio parezca aliviar, en realidad puede empeorar el problema. La piel ya está más frágil de lo normal por las varices, y rascarse demasiado puede causar pequeñas heridas que se infecten fácilmente.

Otro punto importante es la irritación de la piel. Esto pasa porque las varices aumentan la presión en las venas y esto afecta a los tejidos cercanos.

Como resultado, la piel puede enrojecerse, sentirse más caliente o incluso arder ligeramente. Es un síntoma que muchas personas ignoran, pero es una señal de que las venas están afectando más de lo que parece.

Aunque estos problemas secundarios no son tan alarmantes como una úlcera o una trombosis, pueden afectar bastante la calidad de vida.

Si notas picor, irritación o cualquier cambio en la piel, lo mejor es no dejarlo pasar. Consultar a un médico puede evitar que algo pequeño se convierta en un problema mayor.

 

¿Qué hacer si tienes complicaciones?

Si tienes varices y empiezas a notar alguna complicación, no te preocupes, hay formas de manejarlas. Lo primero y más importante es buscar atención médica. Muchas personas tienden a ignorar estos problemas pensando que no son graves, pero tratar las varices a tiempo puede evitar complicaciones mayores.

Dependiendo de los síntomas, un médico podría recomendarte diferentes tratamientos. Por ejemplo, para aliviar el dolor y la hinchazón, puede sugerir medias de compresión. Estas medias mejoran la circulación en las piernas y ayudan a reducir el edema, pero es importante usarlas correctamente para que funcionen.

Si tienes úlceras o heridas abiertas, es posible que necesites curaciones especiales. Estas ayudan a que las heridas cicatricen más rápido y previenen infecciones. En casos más avanzados, el médico podría considerar tratamientos como la escleroterapia o incluso procedimientos quirúrgicos para eliminar las varices.

También es clave hacer algunos cambios en tu rutina diaria. Mantenerte activo, evitar estar mucho tiempo de pie o sentado, y elevar las piernas cuando descansas son cosas simples que marcan la diferencia. Además, cuidar tu alimentación y mantener un peso saludable puede reducir la presión en las venas y mejorar tu circulación.

Por último, no subestimes la importancia de la prevención. Si ya tienes varices, vigilar los síntomas y actuar rápido cuando algo cambia puede ahorrarte muchos problemas. ¡Tu salud siempre debe ser una prioridad!

 

No ignores los síntomas: estamos aquí para ayudarte

Si has notado alguno de estos síntomas o tienes dudas sobre cómo cuidar tus varices, no esperes más para actuar.

En nuestra clínica de varices en Granada, contamos con especialistas que pueden ayudarte a prevenir complicaciones y mejorar la salud de tus piernas. Tu bienestar es lo más importante para nosotros.

¡Contáctanos hoy mismo y agenda tu cita! Estaremos encantados de resolver todas tus dudas y ofrecerte el mejor tratamiento personalizado.

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